Agustín Almendra usará la 22 en Racing. Esa que supo vestir Diego Milito y que quedó mercada para todos los hinchas de la Academia. Y uno de esos fue el flamante refuerzos, que es fana del club. De hecho su amor por la celeste y blanca hizo que pudiera llegar al club en este mercado de pases. Porque luego de quedar libre de Boca, con apenas 23 años, tenía ofertas del exterior y propuestas superadoras desde lo económico. Sin embargo, eligió mudarse a Avellaneda, a ir al club por el que alentaba cuando era pibe y jugar como un hincha más, con el corazón en la mano. Ahora tendrá su gran chance.
El volante de la Academia no dudó. La vio libre y la aprovechó, enseguida. Si bien en un momento se dudó de que la iba a agarrar Juanfer Quintero, el pibe que cumple su sueño de jugar en el club de sus amores llevará la camiseta de un ídolo. La que tiene un significado y un peso especial en Avellaneda. Pero él asume la responsabilidad porque sabe lo que es el amor por el club y el sentimiento. Lo hacía desde la tribuna y ahora lo podrá hacer dentro del campo de juego. Un objetivo más que se cumple.
La idea de Fernando Gago es que empiece a sumar minutos ante Unión, en el partido del debut de la Copa de la Liga. Será suplente e ingresará en el segundo tiempo para ir tomando ritmo. También incluso pensando en el partido con Boca por la Copa Libertadores. Agustín Almendrá saldrá a la cancha este viernes con la 22 de Racing en la espalda. Y así empezará la historia de este volante joven que quiere tocar el cielo con las manos en Avellaneda. Meter un pleno y disfrutarlo como jugador y también como hincha. Un combo letal.
Almendra agarra la 22 de Racing, los últimos antecedentes
No tiene problema el volante de la Academia en asumir esa responsabilidad. Entiende que está preparado y, como hincha, sabe lo que significa llevar ese dorsal en la espalda. El que hay que cuidar y dar un plus. Porque la usó un jugador que se convirtió en ídolo y con la que muchos se sienten identificados. Aunque claro, no siempre fueron buenas experiencias con ese dorsal en la espalda.
Agustín Almendra se pondrá la 22 de Racing y claro que no quiere saber nada con que su estadía en el club tenga que ver con el último que la vistió. En enero de este año llegó Paolo Guerrero y se puso ese número. Incluso lo eligió y dejó en claro que le gustaba ese desafío. Pero la realidad es que no estuvo a la altura y tuvo un muy flojo nivel. Se terminó yendo a mitad de año sin un nivel acorde a lo que necesita el club. Pero si fue muy bueno el antecedente anterior: hablamos de Carlos Alcaraz. Charly tuvo un muy buen 2022 y lo terminó a lo grande, dejando la 22 bien alta. ¿Cómo? Con gol agónico en la final del Trofeo de Campeones ante Boca, poniendo el 2-1. Esa camiseta que se sacó, revoleó al aire mientras la hincha rival, muda, miraba como festejaba. Ojala la historia se repita en la Copa Libertadores en un par de días...
