Se redimió. No estaba en deuda, aunque sí tenía que volver a ser. Lautaro Martínez por fin pudo ser protagonista en un partido de la Selección Argentina. El delantero convirtió el quinto y último penal para dar el pase al equipo de Scaloni a la semifinal del Mundial. El Toro, quien había ingresado para jugar el segundo tiempo, definió cruzado y sentenció la definición por penales tras el 2-2 en los 120 minutos.
Lautaro al fin se pudo sacar la bronca y festejar con la Selección. Había perdido el puesto con Julián Álvarez y en el tiempo extra había tenido una chance dentro del área chica que pegó en un rival y se fue al tiro de esquina. Afortunadamente, tuvo nervios de acero para colocar el balón cerca de un palo a media altura y salir a festejar con el resto de sus compañeros. Fue un desahogo enorme luego del empate de Países Bajos en el último suspiro del partido. Ahí, cuando todo se puso negro, hubo tiempo para bancar la parada y terminar festejando con penales.
Además de Lautaro, la Selección Argentina contó con Rodrigo de Paul y el Huevo Acuña entre los titulares. El volante, quien había estado en duda por una lesión muscular, finalmente fue de arranque al igual que el Huevo. Ambos terminaron siendo reemplazados en la segunda mitad, con el agravante de que Acuña vio la amarilla y no podrá jugar el martes contra Croacia por un pase a la final.
Pero más allá de esto, lo importante para Lautaro y la Selección Argentina es que logró una dosis de confianza en el momento más importante de la Copa del Mundo. Ahora encarará la próxima instancia con muchas más entereza. El desahogo del Toro fue tremendo, abrazado por sus compañeros y a punto de explotar. Qué lindo, Selección.
VAMOS ARGENTINA CARAJOOOOOOOOOOOOOO!!
A SEGUIR ALENTANDO A LA SELECCIÓN SIEMPRE PENSANDO EN POSITIVO!!!!
Era muy injusto el empate.
Si quedaba alguna duda sobre si la selección estaba a la altura, ahora le ganó a un equipo europeo fuerte, y lo dominó casi todo el partido y el alargue.