Atento Racing: ¿Blanco pasa a liderar el fútbol argentino?

Franco, quizá te sorprenda mi respuesta. Para mí Diego Milito es un ídolo, no por nada lleva el nombre de una calle en Avellaneda, lo que Víctor Blanco posiblemente nunca consiga, más allá de que haga bien o mal las cosas. Y eso es porque Diego Milito es un tipo que es un emblema de Racing, como lo es Gustavo Costas, como lo es Rubén Paz, como lo es Basile, como fue Perfumo, y como muchos otros, algunos injustamente no reconocidos (por ejemplo, Ricardo Centurión).

Es más, te sorprenderá aun más leerme decir lo siguiente: creo que la labor de Milito en Racing fue muy buena, de ninguna manera lo "culpo" por los errores, porque el que hace se equivoca. Si hubieses leido con atención mi comentario hubieses visto que dije (copio textual): "Yo creo que Milito hizo cosas muy positivas por Racing, tanto como jugador COMO EN SU ROL DE MANAGER".

Lo que pasa es que acá hay algunas cuestiones. Blanco carga con el peso de ser oficialismo. En cualquier orden de la vida (deportivo, político, etc.), ser oficialismo es un lastre, porque vos no podés cubrir las expectativas de toda la gente y menos cuando las cosas no salen bien. Cuando los resultados empiezan a mermar, incluso en forma relativa (porque el Racing de hoy puesto en el 2012, por ejemplo, es un Racing de lujo, pero la gente se acostumbró a ganar), es muy difícil ser oficialismo, porque llegan los cuestionamientos y aparecen los oportunistas.

Lo que a mi me molesta de Diego Milito es que goza del beneficio de haberse corrido de la escena completamente siendo ídolo. Es decir, hizo abuso de su figura de ídolo para salvar su propio pellejo, dejando a Racing en banda. No importa si tiene razón o no, la verdad es que en cualquiera de los casos lo que hizo es muy irresponsable. Yo estoy personalmente dolido con la actitud de Milito, a quien considero un ídolo, porque un verdadero valiente se compromete, dice la verdad a los cuatro vientos, se queda a laburar por el club, se presenta en una lista opositora, denuncia lo que haya que denunciar, etc., etc. Diego no sólo se borró, sino que lo hizo en un momento durísimo, porque su decisión impactó de lleno en un equipo de Racing que tenía serias chances de pelear las instancias finales de la Copa Libertadores, para lo que se venía laburando duro hacía años. No creo que haya sido gratuito, creo que el hecho de quedar afuera con Boca es consecuencia directa de la decisión de Milito que, a fin de cuentas, no produjo beneficio alguno porque él no dijo nada ni hizo nada al respecto. No sólo influyó en la selección de gran parte del plantel (lo que le costó bastante plata al club) y el DT, sino que dejó todo, abortó ese proyecto en medio de una competición internacional y se fue sin dar explicaciones.

No me cabe en la cabeza cómo el hincha de Racing le puede perdonar a Milito su actitud, excepto por un motivo: por el resultadismo. Si él se iba y Racing ganaba un título, posiblemente muchos iban a olvidar el episodio. Pero como Racing sufrió el efecto de la fractura que se produjo entre Milito y Blanco y eso, evidentemente, impactó en el rendimiento deportivo y en lo institucional, Diego sale como el héroe de la película porque en el imaginario colectivo abandonó un barco que avisó que se iba a hundir. Yo no creo que eso sea ser un héroe, pero para muchos es así.

Respecto a Jimenez y Fernández, sé poco sobre ellos. Y lo poco que sé, no me gusta. Creo que no son gente sana para Racing. Fernández ya no está trabajando en el club, se fue porque evidentemente, como mínimo, no supo educar a su propio hijo y ya eso habla mal de él.
Pero tampoco los voy a juzgar de ladrones o delincuentes sin prueba, como no lo hago con nadie, ni con Blanco, ni con Milito, más allá de las opiniones personales basadas en lo que trasciende a nosotros, los hinchas y socios de Racing. Me parecería perfecto que alguien exponga las pruebas que existan y lo cuente a todo el mundo, si las hay, de que cometieron ilícitos o realizaron actividades indebidas con el patrimonio del club.

Un saludo.

Perdoná pero ni se entiende lo que quisiste decir. Igualmente, sí, sería preocupante. Pero bueno, los socios juzgarán si quieren a un tipo honesto y sano, sin un sólo antecedente, como Cúneo Libarona al frente de Racing o si quieren al malévolo y demoníaco de Victor Blanco...
O por ahí vos sos de los que vienen a pedir por Otero, Lalín o De Stéfano.