María lo acompañará siempre. María dejó de estar físicamente, pero desde el más allá se hace sentir. María fue y es la mamá de Gustavo Bou. La que le rogaba que no largara el fútbol, que no se dejara vencer por el problema de salud con que cargaba ella. Y su hijo siguió. Sacó fuerzas del dolor más profundo y continuó en honor a quien le dio la vida. Después, vino una historia encantadora. Un poder mágico que se despertó en el hombre del Barrio Nebel, una energía que para esta fecha brotó casi siempre desde sus pies. Y afloró de su corazón que la recuerda cada día.
Corroboran los antecedentes que el delantero ha encontrado la manera de regalarle -y regalarse- a su progenitora un gol en cinco de las últimas seis fines de semana del Día de la Madre. Será que la doña lo inspira en esta época y le envía desde el cielo la asistencia esperada, el pase más milimétrico que nadie pudiera servirle. Gustavo esta vez se encuentra en un contexto diferente: no está subido a una ola de festejos personales ni es titular porque su momento dista mucho de su mejor versión. Pero esta noche, en Tucumán, se sentará en el banco. Y nada ni nadie le quita la ilusión de ingresar en algún momento y prolongar su ofrenda espiritual hacia quien falleció cuando ese adolescente adolescía más que nunca a sus 15 años.
La mirada hacia arriba, el antebrazo izquierdo hacia su boca y un beso sobre ese tatuaje de María. La secuencia de su festejo clásico tuvo asistencia prácticamente perfecta en un ritual impactante. La racha de celebraciones en la víspera de esta fecha tan especial nació cuando jugaba en Olimpo. En el equipo de Bahía Blanca, en 2012, anotó el primer gol de un 3-0 sobre Banfield; en 2014, con la casaca del Racing que saldría campeón un mes después, le hizo uno Vélez, el del 2-0 definitivo; al año siguiente, contra Boca, marcó en el 3-1 en un encuentro donde utilizó por primera vez una camiseta con el nombre de mamá; en 2016 la Academia cayó 3-2 frente a Atlético de Rafaela, aunque el entrerriano convirtió un tanto y en Tijuana en 2017 (con Coudet de entrenador), sacudió la red en la victoria de 2-1 ante Lobos por la liga.
Es decir, en este camino recorrido, el único fin de semana del Día de la Madre en que no marcó fue en 2013, cuando jugaba en Liga de Quito.
La Pantera necesita rugir
Gustavo atraviesa una actualidad negativa en lo personal. Detrás de Licha López y Jonatan Cristaldo, no aparece tan relegado, pero las veces que le tocó entrar estuvo fuera de sintonía. Seguramente, los pocos minutos de rodaje y el poco margen de tiempo para intentar revertir su imagen le generaron una presión perjudicial. Desde que regresó a Racing, el atacante apenas hizo un gol: contra Atlético Tucumán, en la primera fecha, en la victoria por 2-0. Ahora lleva ocho partidos consecutivos sin convertir, siete por la Superliga y la vuelta contra River por la Copa Libertadores.
¿Volverá la Pantera a rugir en esta jornada tan particular para él?
No podemos ser tan giles de pensar que por un tiempo en otro país Bou ya no existe!!! Volvera!!!
`MORO DE U.S.A
VAMOS==PANTERA== A PEDIDO DE TU MADRECITA Y DE TODA LA FALANGE RACINGUISTA
==TENES QUE VOLVER A SER . COMO TODOS . TE QUEREMOS VER==. UN BESO A TODAS LAS MADRES JUNTO A MI QUERIDA MAMI QUE SEGURO. ALLA ARRIBA . JUNTO A MI VIEJO ESTARAN CON SU. iDOLO MAYOR . TRATANDO DE CANTAR. JUNTOS. ==MI BUENOS AIRES QUERIDO==
QUE SEGURO EL CANTOR MAYOR DE LA HISTORIA. NO. SE LO VA A NEGAR. .
((((los puntitos putazos es una falla de. esta mal parida compu.))))
vamos RAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAACING CARAJO
CHAU MORO DE U.S.A(((((triste por no. tener a mi madrecita y mi querido viejo. al. lado mío pero. contento. de haberlos tenido)))
Volveré a México otro curro de blanco