Lo reconoció él mismo. También hizo lo propio Eduardo Coudet. David Barbona no llegó con la mejor forma física a Racing. Tal como lo anticipó RdA, esta realidad derivó en un pedido del DT al mediocampista para que afinara la línea. Sus kilos de más llevaron hasta al propio jugador a asegurar que en Atlético Tucumán (su anterior club), no le exigían que se pusiera en línea. Y que además, le permitían jugar con un peso mayor. Encima, Ricardo Zielinski salió al cruce por sus dichos: “Es una estupidez lo que dijo”, lanzó el Ruso. Picante.
Pero no quedó ahí. Desde el club tucumano hablaron en exclusiva con Racing de Alma y revelaron cómo fue su desarrollo físico durante la estadía de Barbona en el Decano. “Él acá jugaba con 75 kilos y su rendimiento físico era de un deportista de élite, unos de los valores más altos en HI (alta intensidad) y aceleración”, le contaron desde Atlético a este portal. Asimismo, detallaron cuál era la intención que tenían allí con respecto a su finalidad física. “La idea era sumar masa muscular y seguir bajando el porcentaje de grasa, de acuerdo a los nuevos parámetros y el objetivo que él tenía que modificar”.
En el mismo sentido, desde el Gigante del Norte le explicaron a RdA cómo era su evolución de acuerdo a su estado aeróbico: “David iba en un proceso de mejora importante, su rendimiento era bueno de acuerdo a todos los datos de los partidos y entrenamientos medidos por GPS”. Por otra parte, desde Atlético Tucumán le aclararon a este sitio por qué Barbona llegó excedido de peso a la pretemporada de la Academia: “Llegó con 80 kilos a Racing porque volvió de vacaciones. Él no va directamente de Atlético a su nuevo club, sino que en el medio hubo unos 30 días en los que estuvo de vacaciones”. Claro, conciso. Toda una situación compleja.
El cruce de Zielinski a Barbona
Ricardo Zielinski fue el último entrenador de David Barbona en Atlético Tucumán. Al Ruso no le sentaron para nada bien las palabras del actual futbolista de Racing. Es por eso, que en diálogo con TyCSports, el DT del Decano apuntó contra Pumpi: “Me parece que David se equivocó, cuando tuvo sobrepeso no jugó”, advirtió el ex director técnico de la Academia.
A su vez, Zielinski argumentó que el problema del exceso de peso del futbolista de Racing fue el descanso que tuvo entre su salida de Atlético y la llegada a Avellaneda. “El problema que tiene es que por ahí en vacaciones se excedió, pero no tiene porqué ensuciar al nutricionista”, disparó. La cosa se puso caliente entre Tucumán y Buenos Aires. Lo cierto es que hoy Barbona oscila los 74 kilos y su forma física es óptima. Ese aspecto le da más explosión a la hora de desbordar y encarar. Sino preguntale al Tomba…
Según Coudet los jugadores tienen que ser de elite, una pretemporada intensa en EEUU y después te agarra River y te deja en ridículo con todos los jugadores parados en la cancha.
El mejor ejemplo es Ortigoza,años rompiendola con kilos de mas y jugando de 5,cuando se juega bien al futbol,un par de kilos de mas no es problema,si para Coudet,su futbol pasa exclusivamente por ahi.
Bebanz es una laucha y dijo estaba tb gordo..cuantos ejemplos mas chacho....
Es verdad lo que dice el Ruso.
Algo de verdad debe haber en las manifestaciones de Narbona, después de ver la actuación de algunos jugadores del equipo decano últimamente. Especialmente volantes y defensores. Los Rivales los dejan parados
Con kilos demás nadie puede tener ritmo de competencia. La mentira de hacer la pausa, el buen pie y tantas estupideces que creen los que nunca jugaron profesionalmente al fútbol o a cualquier deporte o los que lo lograron pero no tienen dos dedos de frente. El complejo que tienen con entender que saber quitar y ser disciplinados no es de picapiedras sino de eficientes. El 90% de los goles nacen de pelotas quitadas en la salida de los contrarios y no de jugadas elaboradas. Insisten con agregar delanteros para ser ofensivos y no crean una sola situación de gol. Jugadores como Zaracho, Nery Domínguez, Montoya y Barbona son fundamentales en el medio para tener quite, ritmo y llegada. Solo Coudet puede tener en cuenta a jugadores que no saben quitar una sola pelota y son lentos como Orbán y el pulpo.