La frase del entrenador de Racing este martes al mediodía en la conferencia de prensa sirvió como disparador para revisar los números del técnico desde que está en el club. A lo que se refería Chacho con estas palabras es a la cantidad de puntos que la Academia ha sacado en esta Superliga, sacando chapa por ser el líder del certamen local y por haber superado a todos los rivales que enfrentó, más allá de los fatídicos minutos finales en tres de los nueve encuentros.
Desde su llegada, Eduardo Coudet dirigió de manera oficial a Racing en 33 partidos. De los 99 puntos en juego, la Academia obtuvo 61 puntos. Es decir, un 61,6 % de efectividad. Durante este ciclo, el equipo marcó 59 goles a favor y recibió 34 en contra. A todas luces, desde lo estrictamente numérico, la campaña es positiva. Si vamos a lo intangible, hay cuestiones a resaltar y también a criticar negativamente. El Chacho le dio una identidad de juego a un equipo que venía sin saber a qué jugaba a fines de 2017. Además, junto a la Secretaría Técnica, acertó en la gran mayoría de los refuerzos que trajo. Todo eso a su favor. En el otro lado de la balanza, los partidos decisivos: ante Colón en el Cilindro, Racing con el empate se metía en la Libertadores 2019. Y perdió. Frente a Sarmiento de Resistencia hubo papelón en cancha de Banfield. Luego la durísima eliminación con River en el Monumental y los partidos que recientemente se escaparon de forma insólita.
Pareciera faltar algo más en los encuentros claves. Es cierto que, tal cual dijo el DT este martes, Racing no ha jugado ninguna final desde que él llegó. Tan real como que en los partidos trascendentales el equipo no dio la talla. Aún así, desde lo numérico y desde cómo juega su equipo, el Chacho le ha dado un salto de calidad a la Academia desde que se hizo cargo del plantel en el arranque del 2018. Y como dice Coudet, "no se puede ser re puntero...".
Dejemos de justificar nuestra mediocridad. Con esa mentalidad no vamos a ganar nunca nada.
Voy a reiterar permanentemente, Racing debe jugar con jugadores nacidos o formados en las inferiores.
Y con respecto al técnico debo decir que se le nota muy buena mano en el manejo de grupo (aunque en esto también ayudan algunos jugadores) y en realidad se nota una manera de juego estable en el equipo, aunque últimamente está variando la forma.
Me gustaría que el conductor de Racing coloque en la cancha al mejor jugador en su puesto. Porque a veces por lesiones o suspensiones van al banco de suplentes, y eso, creo, es dar ventajas.