Un boom cuando llegó. Avellaneda se revolucionó con su incorporación allá por febrero de 2015. Aquel joven de Canelones que apremiaba como la figura joven tanto de Peñarol como de Liverpool de Uruguay. Pura fibra charrúa. Mentalidad goleadora, capacidad arrolladora. Un tanque, como le gusta que le digan en el fútbol cafetero, donde actualmente defiende la camiseta del Deportivo Pasto.
“El apodo Discoteca ya pasó, ojalá que Tanque me quede por siempre”, admite Núñez. Claro, ese sobrenombre se lo habían puesto en Racing. Algunos pocos atendían esa cuestión porque su fútbol importaba mucho más. Hasta que llegó esa noche fatídica del 12 de abril de 2015. El conjunto dirigido en ese entonces por Diego Cocca recibía a Huracán y esa noche, el delantero uruguayo encontraba emociones inconexas en una misma jugada. La felicidad por marcar un gol y la desazón por saber que se había roto el ligamento cruzado de su rodilla derecha. Fatal. Un antes y un después en su carrera. Pero hoy, con 26 años, siente aquello como un viejo recuerdo. Un pasado al que prefiere ganarle con el presente. Y del que promete revancha.
-¿Qué cuenta Carlos Rodrigo Núñez? ¿Cómo estás?
-Todo muy bien por suerte, recién llegado de una sesión de videos que tuvimos en el club. Ahora me voy a sentar a tomar unos mates y mirar un poco de televisión.
-¿Cómo te trata este 2019 en Colombia?
-Bien, la verdad es que llegué a un club humilde que estaba en zona de descenso pero hoy estamos entre los primeros cuatro del país. Ya salimos de la zona del descenso. Es humilde pero tiene todo para trabajar. Un poco molesto por el tema de la visa que no me ha permitido jugar, porque me la habían rechazado. Me tocó salir del país, volver tres meses, muchos quilombos, pero ya está todo solucionado. Ahora ya la tengo de vuelta así que estoy contento por eso y porque me han tratado muy bien. La gente es muy amable y eso me da muchas esperanzas y ganas de trabajar.
-¿Y cómo te sentó el fútbol colombiano en lo estrictamente relacionado a la competencia?
-Al llegar acá pude jugar tres partidos y convertí un gol. Porque cuando llegás como turista te dan tres meses hasta obtener la visa. Es un fútbol muy intenso, con menos juego que el fútbol argentino pero después lo normal. Me he sentido muy cómodo, acá se empezó a hablar de mí y sólo había jugado tres partidos. Ahora estoy con muchas ganas de volver.
-Pasaste por ligas de distintos países, ¿la colombiana cuán competitiva es?
-Yo creo que es menos competitiva que las que ya he estado. Creo que la mejor liga en la que estuve fue la argentina, obviamente. Después, el fútbol mexicano es muy competitivo. Aunque no lo parezca, se juega con mucha intensidad. Por ahí vas ganando tres a cero y faltando cinco minutos te lo empatan o perdes cuatro a tres. Es un fútbol muy complicado. Después me gustó mucho el paraguayo. Pero bueno, acá en Colombia, por ejemplo, no hay favoritos y cualquiera le puede ganar a cualquiera.
-¿Qué tipo de delantero sos hoy?
-Hoy me siento un jugador más completo, maduro y profesional. Obviamente que uno con el tiempo va adquiriendo cosas a medida que va jugando en ligas y equipos diferentes. Va valorando más cosas también. Uno con el pasar de los años se va sintiendo más jugador de fútbol (remarca fúbol, bien uruguayo). A pesar de mi edad, me siento más grande, con más trayectoria que otros. Eso quizás es porque debuté muy joven y tengo más experiencia.
-Estando en ligas donde se prioriza más lo físico, ¿se pueden mejorar cosas relacionadas al juego?
-Sí, totalmente. Uno se debe acoplar y adaptar al juego de la liga en la que está. Tenemos un entrenador que le gusta jugar y que valora la intensidad, no física sino del juego. Uno a eso lo favorece porque en la mayoría de los equipos en los que he estado la prioridad era tratar bien el balón. Por eso quizás hemos sacado mucha ventaja con respecto a los otros clubes de acá. Cuidamos mucho la pelota, tenemos una identidad de juego y eso nos ha hecho ganar los puntos que hemos ganado.
-¿Cómo fue la experiencia en Chile con Unión la Calera?
-Fue muy linda. Tuve la suerte de estar con Gabriel (Arias) y con Brian (Fernández). Justo Gabi se fue a Argentina antes de arrancar el campeonato pero estoy muy contento por él porque se mandó un tremendo torneo y fue uno de los grandes responsables de que Racing saliera campeón. Después a Brian lo tuve como compañero más de un año, ya lo conocía. La liga chilena no es tan competitiva como la argentina pero es lindo jugarla. También estábamos en un equipo humilde que nunca se había clasificado a una Copa Sudamericana y nosotros la jugamos por primera vez. La verdad es que la pasamos muy bien, me trataron de una forma muy grata.
-Recién me nombraste por primera vez la palabra Racing, ¿qué te pasa por dentro cada vez que la decís?
-No puedo explicarlo con palabras. Es increíble todo lo que te genera. Soy uruguayo pero en Argentina nunca había tenido un club que me tire. Cuando llegué la gente de Racing me abrazó. Ellos arropan al jugador. Hasta hoy sigo recibiendo mensajes. Yo a Racing no le dí nada, jugué muy poco por la lesión y a raíz de eso fue impresionante el apoyo que recibí. Este club me hizo sentir amor por la camiseta. Más allá de mi peor momento que fue cuando me rompí los ligamentos, no la pasé mal. Sentía que todo estaba bien. Ojalá pueda volver a pisar el Cilindro, ahora cuando tenga vacaciones voy a viajar para ver un partido porque es lo que me nace. A mi nene trato de transmitirle lo que siento y quiero que sea hincha de Racing. Significa mucho porque marcó un antes y un después en mi carrera.
-Recién me hablabas de aquella lesión ante Huracán, ¿te habías dado cuenta de que te habías roto cuando hiciste el gol?
-Yo venía con un esguince de rodilla y Diego Cocca me había dicho que no jugara pero obviamente que yo quería jugar. Entonces me llevó al banco y me puso en el segundo tiempo. En el momento que el doctor me atiende en la cancha me confirmó que me había roto los ligamentos, pero yo le decía que no. Ahí es cuando pide el cambio pero yo le digo “No estoy roto”. “Sí Carlos, te rompiste”, insistió. Yo solamente quería jugar, así que me levanté de la camilla pero todavía no sé cómo lo hice porque me dolía. Nunca pensé en la rodilla, la tenía muy inflamada. Cuando me dieron la noticia después de hacerme los estudios no me lo olvido más. En el camino del Cilindro a mi casa paré en la autopista y estuve tres horas llorando. Eso me marcó mucho porque me enseñó a valorar muchas cosas.
-Y cuando te tocó volver, ¿ya no fuiste el mismo?
-Al principio, cuando volvés, te sentís con mucho miedo, no estás bien física ni mentalmente. Después ese temor de apoyar o trancar se te va pasando. Nunca más sentí una molestia ni nada, la pierna está más fuerte que nunca.
-Luego vino tu salida de Racing, ¿tuvo que ver con un tema personal del técnico por alguna actitud tuya o fue meramente futbolística?
-Fue una decisión de (Facundo) Sava, yo no tenía una buena relación con él. Un día que perdí el vuelo y no pude llegar un lunes a entrenar, aún avisando, él se enojó y tomó eso como excusa para separarme del plantel. Lo respeté pero como no me iba a tener en cuenta, yo iba a estar ganando un sueldo que no me correspondía, porque no estaba en el primer equipo. Entonces decidí salir de Racing y buscar un lugar donde pudiera jugar.
-¿Pudiste volver a hablar con él? ¿Te dijo personalmente que no te tendría en cuenta?
-No, me lo comunicó por teléfono. Cuando al otro día llegué al club, me mandó a hablar con el profe. Nunca me vio la cara y no me dijo nada más. Igual yo preferí no tener mucho cruce con él. Fue algo muy triste porque tenía muchas ganas de quedarme en Racing. Pero ganar un sueldo que no merecía no era bueno para el club. Entonces para agradecerle todo lo que había hecho por mí, ya que no iba a jugar en Primera decidí dejar mi lugar a otro jugador que aportara lo que no pude en ese momento.
-¿Hubieses querido dar vuelta la página en ese momento y demostrar lo que no habías podido?
-Claro que sí, es más, yo tenía el apoyo de (Víctor) Blanco y (Miguel) Jiménez para quedarme pero la decisión de irme fue mía. No le quería sacar plata al club. Ellos hubiesen anhelado que yo me quedase para devolverles esa confianza que habían depositado en mí pero las cosas se dieron así. Ojalá que en algún momento pueda volver.
-¿Te gustaría volver a Racing para tener tu revancha?
-Obviamente, quiero volver a Racing para salir campeón. Es algo que uno sueña y más en el club del que es hincha. Pero bueno, eso es para más adelante, es el último campeón, tiene un gran equipo y yo lo disfruté tanto como cualquier otro hincha. Porque los hinchas de Racing están locos y me contagiaron esa locura a mí. Uno siempre está con ese sueño de volver. Hay que esperar a ver qué pasa.
-Si fueras el DT de este Racing, ¿pondrías a Carlos Núñez al lado de Lisandro López?
-(Ríe) Sí, obvio. Sería una muy buena dupla. Además a Licha ya lo conozco porque lo tuve de compañero. Más allá de ser un excelente jugador, Clase A, es una gran persona. Un líder positivo increíble, al igual que Diego Milito. Los dos son muy parecidos.
-¿Te tocó compartir alguna vez plantel con un líder de la talla de Lisandro?
-En todos los equipos hay líderes positivos que te marcan. Los que más me han marcado han sido Licha y Milito, en todo sentido. Después tuve de compañero al “Cacha” Arévalo Ríos en los Jaguares de Chiapas. Su liderazgo es muy parecido al de ellos dos.
-¿Cómo viste a este Racing campeón?
-La verdad es que pude seguir los partidos que podía ver. Lo ví muy bien, muy convencidos de lo que querían y a dónde iban. Tenían un objetivo plantado y fueron detrás de ese sueño. En muy pocos partidos lo ví medianamente mal. Pero así y todo, imponían esa rebeldía que hay que tener y sacaban el partido adelante. A lo largo del campeonato fue más que todos los rivales, es un merecido título. Fue muy lindo verlo campeón, fue una gran alegría para todos los que sentimos a Racing bien nuestro.
-¿Quiénes fueron para vos los jugadores clave?
-Es difícil de responder porque todos los muchachos hicieron un gran campeonato. Los ví a todos muy comprometidos pero creo que tuvo una columna vertebral de tres jugadores. Arias, el Chelo Díaz en el medio y Lisandro arriba.
-Última, ¿lo vas a llamar al Chacho en algún momento para volver a Racing?
-(Ríe) No, no puedo hacer eso. Pero si pudiera hacerlo lo llamaría. Ahora lo veo difícil, hay que esperar. Creo que los entrenadores tienen un pensamiento y una manera de ver el juego. No sé si soy o no soy de las características que le gustan al Chacho. Mi representante tiene muy buena relación con Víctor Blanco así que vamos a ver qué pasa en el futuro, por ahora lo seguiré alentando a la distancia.
Ojalá q pudiera volver Núñez q buen jugador y goleador así Racing tendría carta goleadora para la próxima Copa Libertadores .
Totalmente de acuerdo, se necesita un delantero con sus caracteristicas
Volver discoteca!!! Jajaja Mauricio cuero de Belgrano .. un enganche y un volante central defencivo.. y otra vuelta
Discoteca debe ser uno de los mejores apodos del mundo que escuche, que deje la joda pero no el apodo
Lo mismo que Cristaldo que vino sin la panza, Núñez que venga sin la botella..ja. En realidad es un nueve de área, con fuerza y con la sangre de los jugadores uruguayos. Seria una buena incorporación
Dejo un excelente recuerdo.
Nuestra delantera necesita potencia.
Licha y Cita están viejitos.
Necesitan compañía con potencia.
Cuero, es interesante también.
Tenemos 2 grandes de enorme jerarquía adelante, pero suman 70 años,el uruguayo mostró condiciones interesantes y capacidad goleadora, sería un refuerzo a la altura de lo que Racing necesita para el próximo año. Dale Blanco!!!,traelo, no te vas a arrepentir!!!ca
Si es verdad, Cuero es interesante y no debe ser muy caro. Tiene mucha hambre y ganas
Me conmovió este pibe. Qué hermoso que un oriental se enamore así de nuestro Racing. Ojalá vuelva y salga campeón