Hizo público su amor por Boca y salió en los medios que tuvo chances de jugar en River, pero lo que pocos saben es que realmente estuvo cerca de llegar a Avellaneda. Por 20 años, entre la década del 90 y la de 2000, fue uno de los jugadores más relevantes de Holanda. Pasó por Milan, Juventus, Inter, Ajax y Tottenham hasta que a mediados de 2010 casi se da lo impensado. El día que Edgar Davids casi es refuerzo de Racing.
Para ese entonces, ya sin el objetivo de mantenerse en Primera y con el deseo de trascender más allá de las fronteras, la dirigencia de Molina y Podestá ya habían hecho el primer movimiento. A principios de 2010 habían contratado a Roberto Ayala. Si bien no terminó rindiendo, a priori el objetivo seducía. Se sumaba a un caudillo, un ganador y con experiencia europea. La Academia quería sumar jugadores con títulos bajo el lomo y de calidad internacional. Y en ese verano rompió el mercado con las llegadas de Hauche, Bieler y Licht. Estaba para dar el salto. El Ratón, que recién debutaría en febrero, parecía ser la frutilla del postre.
Ofrecieron a Davids a Racing y llegó Gio como refuerzo
Seis meses más tarde, ya con Miguel Ángel Russo como DT, las llegadas de Gio Moreno y Patricio Toranzo ilusionaron a los hinchas. En medio de las difíciles negociaciones por el colombiano, figura de Atlético Nacional, apareció el nombre rimbombante de Edgar Davids. El nacido en Surinam había terminado su contrato con el Crystal Palace de Inglaterra y se encontraba libre.
"El nombre nos gustó. Era caro, pero se podía pagar. Lo que pasa es que no hablaba español y ya habíamos sido muy criticados con el tema de Matthäus. No nos animamos por el momento. Si fuera hoy, te diría que sí. Fue un caso similar al de De Rossi", le confirmó un ex dirigente a este portal. Y agregó: "Tenía ganas de jugar en Argentina, pero no se dio".
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