No es necesario armar un abecedario, prender una vela y apagar las luces para que se haga presente. Su espíritu habla solo. Y mirá si habló. Desde el momento en el que supimos que Diego Cocca había decidido volver a Racing todo cambió. La mentalidad, el estado de ánimo, la confianza, los objetivos... ¿O acaso vos no cerraste los ojos y te viste arrebatándole a Boca el torneo? ¿O no te ilusionaste con jugar otra Copa Libertadores? ¿O con ganar la Sudamericana? Yo, confieso, sí. Hasta por momentos pensé que el técnico de Boca estaba preocupado por la Academia. Es más, hasta sentí que el ingreso a la Libertadores era un trámite, algo que veía imposible el semestre pasado. ¿O no? Con la vuelta del DT campeón y el Racing Positivo, todo parecía al alcance de la mano.Ese espíritu que llegó con el regreso de Cocca nos engañó. No porque todavía no sea posible, ojalá que sí (a siete de Boca, los números todavía dan, aunque...), pero porque nos envolvió en un mar de dulzura y nos dejamos llevar. Los cinco triunfos al hilo (ocho en total con Cocca sumando el de la Sudamericana), nos hicieron olvidar de lo mal que jugamos el semestre pasado, de los problemas defensivos, de lo mal que está Orion... Cocca, en Racing, todo lo puede. Aunque la derrota en el clásico nos hizo dar cuenta de que lo de Temperley y Belgrano no fue casualidad y que todavía falta para poder pelear arriba, de que entrar a la Libertadores no está tan sencillo y que necesitamos refuerzos para ganar la Sudamericana. Nos hizo perder el foco del objetivo principal que es volver a jugar la máxima competencia internacional.
Hoy Racing no está para ser campeón. ¿Puede serlo? Claro. Pero la realidad indica que, gracias a la vuelta de Cocca, estamos para pelear la clasificación a la Libertadores. Sí, para pelear, no para asegurarnos un lugar. Por suerte el entrenador, y los jugadores, lo saben. Al menos siempre pusieron por delante el objetivo de la Libertadores por encima de pelear el torneo. Se cansaron de avisarnos, pero no lo quisimos ver. Pero Diego volvió con ese objetivo. El tiene claro cuál es su juego en este semestre. El juego de la Cocca...
