Lo que ocurrió el domingo en la cancha dejó caliente a Víctor Blanco. El presidente de Racing dio el visto bueno para que el partido se jugara con público visitante, pero las cosas no terminaron saliendo bien. Hubo autos rotos, gente golpeada y hasta piedrazos y botellazos de los hinchas de Lanús cuando llegaron al estadio.
Claro, a raíz de esto Blanco decidió no jugar más con visitantes hasta que le garanticen la seguridad para "los socios y simpatizantes del club". Y luego de las declaraciones del presidente Académico, el titular de la Aprevide (organismo de seguridad en el fútbol), Juan Manuel Lugones, salió a intentar poner paños fríos y tratar lo del domingo como un hecho aislado. "Entiendo la postura de Blanco y que no quiera llevar más visitantes. La realidad es que no podemos prever que haya imbéciles tirando piedras", aseguró Lugones en TyC Sports. Así, parece difícil pensar en dos hinchadas en un mismo estadio...