No es fácil jugar en Racing. Y menos de delantero. Esta época en la que Diego Milito le dejó la posta a Lisandro López mientras Lautaro Martínez irrumpía como la gran aparición de la última década no dejó demasiado lugar para otros atacantes. Pero Facundo Espósito no se rinde. A días de cumplir los 19 años, el Tanque lucha por ganarse un lugar como centrodelantero titular en la Reserva.
"En 2018 algunas expulsiones tontas me sacaron de foco y después me costó volver a recuperar terreno", le cuenta el joven atacante a RDA, tras jugar un picadito en una playa de Villa Gesell (ciudad en la que pasó gran parte de su infancia). En el discurrir de la entrevista, no le faltará autocrítica ni optimismo en una charla que se extenderá por más de media hora. Con metas claras y un bolso lleno de esperanza, el pibe que hace un par de días le metió un gol en Reserva a Boca en un amistoso, la rompe en el mano a mano con RDA.
-¿Cómo analizás tu 2018 en Racing?
Sinceramente, no fue del todo bueno. Me costó ganarme un lugar en la Reserva y encima algunas expulsiones tontas me complicaron un poco.
-¿Por qué sentís que no pudiste despegar?
-Pensé que estaba a un paso de jugar en Primera y de repente perdí protagonismo en Reserva. Pero no hay excusa. Tengo que volver a ganarme un lugar como hice en 2017, demostrando todo lo que tengo para dar en la cancha. Este año estoy totalmente mentalizado en romperla en la Reserva.
-Debutaste en el selectivo siendo joven y anduviste bien. ¿Qué pasó después?
-Mi mejor momento en la Reserva fue a mediados de 2017. Después justo volvió Augusto Lotti de suiza y bajó de Primera Brian Mansilla. Ahí se me hizo muy jodido sumar minutos y fui perdiendo confianza.
-¿Qué clase de delantero sos?
-Soy de estar entre los centrales. Me gusta luchar con ellos y ser un animal del área. Salvando las distancias, tengo un estilo parecido al de Ibrahimovic. O al de Lautaro. Otro que me encanta como juega es el Pipita Higuaín. Trato de copiar lo mejor de ellos y miro todos sus movimientos.
-¿En qué aspecto de tu juego sentís que te falta mejorar?
-Tengo que aprender a estar más atento a la segunda pelota. Saber olfatear mejor para donde pueden derivar los rebotes y aprovecharlos. Creo que eso lo iré puliendo a lo largo de mi carrera.
-Tras la partida del colombiano Mejía y con Cuello abocado a la Primera, tal vez sea tu momento en la Reserva...
-Sí, sin ninguna duda. Quiero ser el nueve titular de la Reserva en 2019, marcar goles y poder dar el saltito a Primera. Es para eso que me mato en cada entrenamiento.
-¿Cómo es cruzarte con centrales como Sigali y Donatti cuando hacen fútbol contra la Primera?
-Es bravísimo enfrentarte a los centrales de la Primera de Racing en las prácticas de fútbol formal. Son muy fuertes y no te dan un metro. A veces igual los chicos de Reserva intentamos no ir con todo a las jugadas porque lo primordial es no lastimar a nadie.
-¿Cómo nació tu amor por el fútbol?
-Nací en Capital Federal pero pasé toda mi infancia en Villa Gesell. El que me hizo amar el fútbol es el Marroquí, un entrenador de un club de Gesell que es un fenómeno. Es el gran responsable junto a mi vieja Graciela de que yo esté en Racing.
-¿Cómo llegaste a conocer al Marroquí?
-El fundó un club allá en la Costa al que le pusieron Marroquí, en honor a su apodo. También le decimos el Pelado. Mi mamá se enteró de la inauguración del club y me avisó para que vaya con mis amigos. Ahí aprendí a jugar en once. La primera vez que fui dije que yo jugaba de enganche. A los tres minutos de la primera práctica, el Pelado me dijo que tenía que jugar de nueve de área, entre los centrales. Él me puso Tanque, el apodo por el que me llaman todos desde ese momento.
-¿De qué manera se dio tu llegada a Racing?
Estuve más de cuatro años en el Marroquí. Me vieron en un torneo en Mar del Plata donde metí varios goles y me llamaron para jugar en Boca de Mar del Plata. Un año después jugué contra la categoría 2000 de Racing un amistoso, hice un doblete y me dijeron que fuera a probarme a Avellaneda. Por suerte anduve bien y quedé.
-Pasaste gran parte de tu infancia jugando al fútbol en una ciudad balnearia. ¿Jugabas mucho a la pelota en la playa?
-A toda hora, je. De hecho, recién vengo de jugar en la playa al fútbol con unos amigos.
-¿Te ayudó en algún aspecto jugar tanto a la pelota en la playa?
-Sí, para mí te suma en todo. Más que nada en la agilidad y la capacidad de reacción. Aparte te tirás al piso en la arena sin pensarlo dos veces. Sabés que no te va a pasar nada.
-¿Cómo viviste la experiencia de jugar la Copa Ipiranga en Brasil con la Reserva?
-Fue un torneo muy lindo, una gran experiencia. Nos costó bastante acostumbrarnos a la pelota y a la cancha. Encima los árbitros eran muy localistas. Pese a eso, creo que tuvimos una buena participación (Racing igualó en sus cuatro presentaciones).
-¿Pudiste sumar minutos en Brasil?
-Entré en todos los partidos y en el último tuve la chance de jugar de titular. Quedé conforme con lo que pude dar y espero que haya sido el primer paso para ganarme un lugar importante nuevamente en la Reserva.
-¿Cuál de los pibes con los que compartiste inferiores en Racing es el que más te sorprendió?
-Juli López y Alexis Cuello son dos fenómenos. Por eso ya están con el plantel de Primera. Cuello tiene una madurez distinta a todos. Es una gran persona y un excelente futbolista. Pero el que más me sorprendió desde que llegué a Racing es Rodrigo "el Pipi" Aquino.
-¿Por qué?
-Nunca vi algo igual. Era sólo cuestión de darle la pelota y él resolvía todo. A los 15 años compartíamos delantera el Chucky (Cuello), el Pipi y yo. Jamás vi correr tanto a un pibe. En ese momento usábamos GPS y nos comentaron que el Pipi corría lo mismo a esa edad que un futbolista profesional. Lamentablemente se fue del club por problemas personales. Una verdadera lástima. Era un crack tremendo.
-¿Cuál es tu mayor objetivo en 2019?
Quiero jugar, ese es mi mayor objetivo. Tengo que demostrar porqué estoy acá. Me encantaría poder destacarme en la Reserva y ser citado para la pretemporada de invierno junto al plantel profesional. Ahí es donde apunto.
-¿Y tu mayor sueño?
-Todos los días pienso en el día en que pueda debutar en Primera. Lo sueño todos los días. Jugar con Licha López sería un sueño cumplido, es un ídolo..