Esta noche le va a costar dormir. No lo puede creer. Lautaro Martínez no para con las emociones en este 2017, en el que dejó de ser una promesa para convertirse en realidad. Arrancó el año logrando la clasificación al Mundial Sub 20 para la Selección y siendo la figura del Sudamericano, y se sumó al plantel de Racing enseguida, con la obligación de reemplazar al ídolo: Licha López, quien sufrió la rotura del ligamento lateral de su rodilla derecha y tiene para un mes de recuperación. Pero al pibe no le pesó la responsabilidad. Cumplió en los amistosos, tuvo un partido aceptable con Rionegro Agulas por la Sudamericana y ayer, se notó que a medida que suma minutos, se está empezando a entender con Bou. De hecho, a los 2' ya había marcado su primer gol en el Cilindro, tras un buen centro de la Pantera. "Me siento muy feliz por haber convertido mi primer gol en este cancha hermoso. Es una alegría inmensa", reconoció el delantero, que abrió el caminó de la goleada ante Lanús y lleva dos tantos en el club (el otro fue este torneo, en el 1-1 ante Huracán). Y explicó su tanto: "Me la jugué al primer palo porque vi que Gustavo (Bou) estaba con pocas fuerzas. El centro fue a la cabeza".
La joyita de las Inferiores mantiene los pies sobre la tierra. No se encandila con los flashes y entiende que debe mantener el perfil bajo para seguir creciendo. "Esto me da mucha confianza y me ayuda para trabajar mas tranquilo. tengo mucho por aprender todavía. Estoy contento porque ganamos, porque la cancha explotó y la gente alentó como siempre", se emocionó Martínez, todavía exhausto por la entrega dentro del campo.
Además, el pibe se mostró feliz porque se siente cómodo con el funcionamiento del equipo y cree que a medida que pasan los partidos, van logrando un mejor nivel. "Estamos haciendo las cosas bien y de a poco vamos aceitando la idea que pretende el entrenador. Lo bueno es que las cosas están saliendo", confesó el delantero.