Gago, un luchador con ganas de pelear en Racing

El termómetro popular marca que la llegada de Fernando Gago no fue tomada de la mejor manera por los hinchas de Racing. Si bien su perfil ofensivo pudiera adaptarse al paladar del club, las seis derrotas consecutivas con las que se fue de Aldosivi, su primera experiencia como DT, son un antecedente demasiado pesado como para llegar a un gigante como la Academia. El ex volante central no supo adaptar su libreto a un plantel más limitado y lo pagó caro. ¿Aprenderá de los errores? Lo cierto es que, a los 35 años, el entrenador también arrastra un historial deportivo plagado de trabas en el camino, que supo superar una tras otra. Ahí podría tener un punto de conexión con la idiosincrasia de Racing. Fueron cinco las graves lesiones que pusieron en jaque su carrera como futbolista y las superó todas. Por eso, también le encantó el desafío de agarrar un fierro caliente como la Academia y tratar de devolverlo al camino de los triunfos.

Sus primeras lesiones graves

Su primera lesión realmente grave la sufrió el 13 de septiembre 2015. Jugando el Superclásico con la camiseta de Boca, a los 25 segundos de partidos sufrió la rotura del tendón de Aquiles de su pie izquierdo. La lesión le demandó cinco meses de parate pero casi que no tuvo tiempo de disfrutar la vuelta. En 2016, específicamente el 24 de abril, volvió a tener la misma lesión y también jugando contra River. La rotura del tendón de Aquiles, esta vez, lo obligó a estar más tiempo alejado de las canchas y hasta se puso en dudo si Fernando tendría el temple para volver. Lo hizo siete meses más tarde. "Hace 15 años que tengo el dolor ese en los Aquiles. Es por un sobrehueso. Yo jugaba siempre porque me infiltraba", llegó a decir, admitiendo que no fue una sorpresa la rotura del Tendón.

Tras su segundo retorno se mantuvo sano hasta octubre de 2017 y hasta pudo volver a su mejor nivel. De hecho, su tercera grave lesión se produjo jugando para la Selección. El 5 de octubre, jugando contra Perú en cancha de Boca por Eliminatorias, Gago sufrió la rotura del ligamento cruzado anterior y el lateral interno de la rodilla derecha. Un golpe que pintaba de nocaut. Cansado de las lesiones, y ya al tanto de que se había roto, pidió que lo vendaran y quiso seguir jugando. Pero el físico le dijo basta y volvió por otros siete meses a las sombras. En los principales medios deportivos se ponía en tela de juicio, una vez más, la continuidad de Gago como profesional. Trabajó en silencio y una vez más volvió.

Las últimas lesiones de Gago y su carrera hasta llegar a Racing

El 9 de diciembre de 2018, en el histórico River-Boca jugado en Madrid, Fernando sufrió su tercera rotura del tendón de Aquiles. Fue en el tiempo extra cuando pidió el cambio y salió ya resignado. Era el punto final de su carrera. Eso pensaban todos menos el propio Gago. Ya había rescindido su contrato con Boca y no había comunicado cómo seguiría su vida. Sólo su familia y él sabían que no iba a tirar a la toalla. Seis meses más tarde, y por pedido de su hijo Mateo, Pintita se puso de pie una vez más. Esta vez en Vélez y gracias a que su amigo Gabriel Heinze era el técnico. Arrancó bien hasta que sufriría la quinta y última lesión grave de su carrera. Contra Aldosivi, en enero de 2020, otra vez se rompió los ligamentos cruzados de la rodilla izquierda. Tras 213 días parado, volvió contra Peñarol por Copa Sudamericana y el 8 de noviembre, justo contra el Gimnasia de Maradona, pudo lograr lo que tanto deseó: se retiró del fútbol de pie y dentro de la cancha.

Más allá de los golpes y de ser un gladiador en cada recuperación, la carrera de Fernando Gago fue sumamente exitosa hasta llegar hoy a Racing. Además de Boca pasó por el Real Madrid, Roma, Valencia, Vélez y la Selección Argentina. Ganó 11 títulos locales y otros cinco títulos internacionales, entre ellos un Mundial Sub 20 y un oro olímpico. A los 35 años, quiere ponerse de pie junto a Racing....