Tras una década lejos del club que lo vio nacer, Bruno Zuculini volvió a Racing. En la llegada del volante, mucho tuvo que ver Gustavo Costas, que desde el primer momento en que asumió no dejó de insistir en su regreso a la Academia. Bruno llega para ser un líder en el vestuario y así cambiar las energías del plantel. Además, claro, de querer brillar dentro de la cancha.
La felicidad de Bruno Zuculini por volver a Racing
A Bruno Zuculini se lo notó muy contento con su regreso al club y, tras la revisión médica, les dejó un mensaje alentador a los hinchas de Racing. “Siempre fue mi primera opción”, dijo Zucu, esperanzado en volver a vestir los colores celeste y blanco. Pero Bruno no sólo es un emblema de Racing, sino que es historia dentro del Primer Grande, al ser el segundo jugador más joven en debutar con el manto sagrado académico. Fue superado hace muy poquito por Gonzalo Escudero, quien también debutó con 16 años pero menos meses.
El oriundo de Escobar inició su carrera profesional en la derrota frente a Gimnasia de La Plata, en el año 2010. Lo hizo cumpliendo el sueño de llegar a Primera y jugar junto a su hermano Franco. Tras sus buenas actuaciones, se fue generando un lugar en el plantel. Y la comodidad en el club de Avellaneda hizo que Bruno Zuculini se quedara cinco temporadas en Racing, jugando un total de 101 partidos, marcando 10 goles y 2 asistencias. Números que no volvería a repetir en su carrera.
La poca continuidad en Europa
Tras ser potenciado por Luis Zubeldia y conformar un equipo de jóvenes estrellas, entre ellos Rodrigo De Paul, Luciano Vietto y Ricardo Centurión, Bruno fue vendido al Manchester City. El equipo inglés desembolsó 2.500.000, por el total de su ficha. Pero allí su realidad fue muy distinta y le costó la adaptación. Jugó un solo partido y partió hacia la liga española, para jugar en el Valencia. El fútbol europeo le estaba jugando una mala pasada y le costaba adaptarse. Tras la preocupación por no poder asentarse y pasar por el Córdoba de España, Middlesbrough de Inglaterra y AEK Atenas en Grecia, Zucu volvió a España para jugar en el Rayo Vallecano. Allí tuvo más participación, jugando 11 partidos.
En un lapso de tres años, jugó un total de apenas 33 partidos, donde en ninguno convirtió goles ni repartió asistencias. Su crecimiento en el Rayo hizo que el Hellas Verona quisiera contar con él en 2017 para juntar nuevamente a los hermanos Zuculini. Su cercanía y comodidad, parecida a la vivida en Racing, hizo que su nivel ascendiera. Teniendo así dos temporadas con rodaje, siendo importante y obteniendo un ascenso a la Serie A.
Su regreso al fútbol argentino
Cuando todos pensaban que su vuelta sería a Racing, el llamado de Marcelo Gallardo cambió el rumbo de Bruno Zuculini. Esta espina todavía le duele a algunos hinchas. En 2018 firmó con River, donde pasó seis años en el equipo millonario. No tuvo tanto rodaje y siendo siempre una segunda pieza, pero clave en el vestuario. Zucu, finalmente, decidió cambiar de aires tras jugar apenas dos partidos en el 2023 por una grave lesión del ligamento anterior de su rodilla izquierda. Por eso y la insistencia de Costas por contar con él, Bruno Zuculini finalmente decidió regresar a Racing.
Foto @racingclub
Leyendo la nota estoy más procupado que antes.
Que camada esa que sacó Zubeldia: Bruno Zuculini, De Paul, Fariña (que habrá sido de él), Vietto..Después vino Viola, que parecía muy bueno aunque despues decayo.
La camada no la saco Zubeldía, los pibes no estaban debajo de una baldosa. Para llegar a eso hubo q hacer un gran trabajo el q llevo adelante Fabio Radaelli como coordinador. Después de el vino la improvisación, los q aman demasiado al club pero q no ouedieron formar juveniles q puedan explotar en primera. Pensé q con Romano se había solucionado, pero de buenas a primera decidió no renovar el contrato. Una pena, alguien q sabe, y con ganas de hacer las cosas bien.
Che. Ya pueden cambiar la foto de Hauche por la de Bruno o Carbonero así están todos los colombianos.
Yo los quiero a los Zuccu, pero prefirió Riber, vuelve medio viejo, bastante roto y con cero rodaje.... Me parece que no hay que mezclar corazón con negocios.