Licha: “Nunca imaginé esa locura en el Obelisco”

Ya pasó la euforia del primer momento, la emoción a flor de piel en la barrera del tiro libre de Tigre, que hizo llorar a todo Racing. Sus veinte minutos de soledad en el vestuario, la locura en el Obelisco. Ya pasaron los hechos intensos y quedaron las buenas sensaciones. Así vivió la obtención del título Lisandro López, el capitán del barco, el goleador insaciable con una personalidad única, que el lunes agarró la caña y se fue a pescar solo. Un día después del delirio, Licha se aisló y relajó la mente. Así es el emblema de este Racing campeón.

En una entrevista exclusiva para el diario Olé, Licha repasó esos momentos de la coronación con la misma movilización que producen los recuerdos hermosos. Pero también mira a futuro porque nunca va a dejar de mirar para adelante.  

-¿Qué imagen de todas las que viviste en estos días te impactó más?

-La gente que había en el Obelisco. Nunca imaginé que iba a haber tanta gente, nunca imaginé esa locura en el Obelisco. No me convencía mucho la idea de ir a festejar porque lo podíamos hacer el domingo, en nuestra cancha. Pero después me di cuenta de que valió totalmente la pena. Nunca imagine todos esos hinchas en el Obelisco, me sorprendió y no me lo voy a olvidar. En 2014, al ser de local, mucha gente festejó en el Cilindro. Esto fue asombroso, increíble. Arriba del micro no podíamos creer la cantidad de gente que había. Es una locura gigante lo de la gente de Racing". 

-¿Cómo fue tu día después de la gloria?

-"Agarré el mate, el perro y la caña y me senté a pescar toda la tarde. Estuvo flojísima la pesca, pero ya era mucho pedir. Me quedé solo con la caña  y sentí una tranquilidad enorme, una satisfacción que no puedo ponerla en palabras. Recordé todo lo que luché por esto. Fueron tres años y medio buscando de la misma manera. Siempre me entrené y entregué por ese objetivo. Siempre quise un título con el club.”

-¿Tenés una sensación de liberación?

-Hay una mochila que se vació bastante. Era algo deseado y soñado. Es un peso importante que dejo de lado. Pero esa mochila se va a volver a cargar dentro de poco; quiero ganar cada torneo. Voy a seguir queriendo más.

-¿Cómo fue el vestuario en la cancha de Tigre?

-Hermoso. Me sumé a los festejos después de 20 minutos porque no podía parar de llorar. Era como una bomba de tranquilidad que me invadió en ese momento. Fue una descarga. Después fue muy lindo. Momentos de mucha euforia. De jugadores, utileros, cuerpo técnico, dirigentes y administrativos.

-¿Cómo fueron esos últimos dos minutos dentro de la cancha de Tigre?

-Todo confusión. Desde adentro veíamos que en el banco ya estaban festejando. No teníamos ni idea de cómo iba Defensa. Sabíamos que estábamos cerca de ganarlo. Hacíamos un gesto y nos decían que Defensa había perdido, que ya estaba. Hasta desde el banco de Tigre nos decían lo mismo. Después, nos empató Tigre y empató Defensa. Por suerte terminó con el título.

-¿Ya estás hecho?

-No, eso no. Si algo se llenó fue dentro mío. Era algo que yo necesitaba y deseaba. Tengo un enorme cariño con la gente y les estaré eternamente agradecido. Ahora queremos regalarles más títulos.

-¿Si no hubieran ganado el título te habrías retirado del fútbol?

-No, retirado no. Y tampoco irme del club. Cuando firmé la renovación hasta junio de 2020, lo hice más allá de un título o no. Tengo un compromiso muy grande con este club. 

-¿Qué Cilindro imaginás el domingo?

-Ufff... Va a ser algo muy lindo. Vamos a poder festejar en el Cilindro. Veremos qué harán estos locos y qué tendrán preparado.

Fuente: Olé.