En un amistoso ante Los Andes, Andrés Felipe Ibargüen ratificó el buen presente que está atravesando en Racing y anotó un gol en el triunfo 2-0 (el otro lo hizo Cuadra, que ingresó por Licha) en el partido jugado a puertas cerradas en Avellaneda, que fue de dos tiempos de 25 minutos para los titulares. Tras un centro desde la derecha de Solari, al ras del piso, el colombiano entró solo y empujó la pelota solito. Pero todos los goles valen uno, obvio... El equipo de Cocca, pensando en lo que viene, formó con Musso; Solari, Vittor, Barbieri, Orban, Soto; Arevalo Ríos, Meli; Ibargüen; López y Triverio.
Vale recordar que el colombiano venía de anotar ante Tigre en el último partido oficial que disputó el conjunto de Cocca. El entrenador, habida cuenta del destacado rendimiento que viene teniendo la Cobra en los últimos partidos, comienza a darle mayor confianza y lo piensa como un probable titular para enfrentar el martes próximo a Libertad en Paraguay, por la ida de los cuartos de final de la Copa Sudamericana.
Libre por todo el frente de ataque, Ibargüen está siendo el condimento más picante de una ofensiva a la que le viene costando marcar goles. De hecho, el gol ante el Matador convertido por Pikiña cortó una racha de varios partidos sin que la Academia pudiera festejar un tanto en la Superliga y, justamente, el último antes de la sequía también lo había hecho el nacido en Cali ante Temperley.
En el amistoso ante el conjunto de Lomas de Zamora, en un partido de mucha paridad, el colombiano abrió el camino de la victoria convirtiendo el primer tanto para volver a demostrar que el período de adaptación ya está finalizado. De a poco, va mostrando cosas que hizo en Atlético Nacional, su último club.
Ahora, es momento de disfrutar al jugador por el cual la Acadé hizo la mayor inversión en toda su historia. Los 4.000.000 de dólares que pagó Racing por el 80% del pase comienzan a verse justificados por un jugador que está aprovechando cada chance que el DT le brinda. "Estoy agarrando el nivel que tenía antes de llegar”, dijo Ibargüen después de vencer a Tigre el sábado. Queda claro que sus palabras se están viendo reflejadas en los hechos. Ver para creer.
