El Estadio Da Luz, uno de los más lindos de Europa y propiedad del Benfica, se convirtió en uno de Gerli. De enfrentar al Milan y tener de compañeros a David Luiz, Di María, Aimar y Saviola, a jugar en la C con El Porvenir y terminar a las trompadas con algunos rivales de Sacachispas. José Shaffer las vivió todas. Desde siempre. Por eso no es nuevo este desafío que la vida le puso a los 31 años. "Llegué a este club en enero. Me abrieron las puertas después de jugar en Gimnasia y Esgrima de Mendoza (Federal A). Le estoy muy agradecido a El Porvenir, que me da la posibilidad de jugar pese a que había perdido las ganas... Unos representantes se me acercaron para llenarme la cabeza en el sentido positivo y me convencieron de seguir", le cuenta el zurdo a RdA, en un mano a mano exclusivo.
-¿Cómo es jugar en la Primera C después de estar en Benfica?
-Y, es duro. Estuve ahí arriba... No es fácil, pero todos los días me levanto temprano pensando que voy al Real Madrid. A El Porvenir lo veo como un club grande. Me mentalizo en que juego en el mejor club de la Argentina.
-¿Qué es lo más difícil de la categoría?
-Yo no la conocía... Lo que más me sorprende es cómo los árbitros se lavan las manos en muchas jugadas. El otro día se armó un quilombo con Sacachispas, terminamos a las trompadas. Y el árbitro no dijo nada... Los jugadores estamos muy desprotegidos en esta categoría.
-¿Qué pasó en tu carrera para que terminaras en la C, con 31 años y un pasado en Europa?
-Todos los días me lo pregunto. Por ahí fui uno de los tantos jugadores mal encaminados por los representantes. En su momento estaba bien con muchos, pero después se lavaron las manos. El jugador confía en ellos, piensa que estarán toda su vida a su lado. Pero no es así. Terminé solo, descubierto.
-¿Te sentiste abandonado por alguien?
-Tal cual. Porque esto es un negocio. A veces, el jugador cree que el representante es la mejor opción que tiene. Nosotros nos equivocamos en confiar tanto en ellos. Sabemos que cuando te pueden meter la mano en el bolsillo, lo hacen. Y lo mismo cuando tengan que dejarte tirado...
-¿Qué pasa por tu cabeza cuando ves por tu Facebook ese golazo casi desde tres cuartos de cancha jugando un amistoso en Benfica, contra el Milan?
-En este momento me hacen poner la piel de gallina... Son recuerdos hermosos. Lo veo y me digo: "¡Mirá dónde estuve!". Es una alegría bárbara poder contarles a mis hijos que compartí cancha con grandes jugadores. Pero a veces me veo jugando en la Primera C y me quiero morir. Esto es como arrancar de cero, como cuando llegué a la pensión de Racing sin ser nadie.
-¿Estás jugando para llegar a fin de mes o para despuntar el vicio?
-Estando afuera supe invertir la plata. Hoy quiero demostrar que puedo estar para un Nacional B o una Primera. Todavía estoy vigente. Y juego por amor a esto.
-¿En qué invertiste el dinero?
-En departamentos y unas cabañitas que tengo en Córdoba. Son cosas que me ayudan a vivir de los alquileres.
-¿Qué sacrificios tuviste que hacer por el fútbol?
-Cuando llegué a la pensión estaba Lisandro López, me acuerdo. El sabe lo que es sufrir, igual que Mariano González. A veces no teníamos qué comer y nuestros padres nos mandaban la comida. Se hacía complicado vivir el día a día.
-¿Cómo era Licha en ese entonces?
-Excelente. Si es capitán ahora, imagínense lo que en ese entonces, en la pensión. Era un referente para nosotros, además él ya estaba jugando en Cuarta o Reserva. Para nosotros, ir a verlo en esos partidos era algo lindo. A nosotros nos contaba lo que le había pasado a él también cuando llegó a la pensión, y nos daba más ganas de seguir.
-¿Cuál fue la etapa más dura?
-Cuando volví de mi préstamo a Suecia (2006/07), en Racing no me tenían en cuenta. Como había sido papá, tuve que alquilar una carnicería abandonada y vivir ahí. Estuve un año. Pasé frío, uno no cobraba lo que se gana hoy con el sueldo mínimo. Me levantaba muy temprano para irme a entrenar y me tomaba el colectivo. En vez de comprarme un par de zapatillas para mí, usaba esa plata para pañales y fideos. Mi familia tenía que comer.
-¿Y qué pensás cuando hoy hay sueldos tan altos incluso para jugadores que no son estrellas?
-Han cambiado las cosas. Hoy los pibes de la Cuarta o Reserva prefieren un autito en vez de darle valor a un plato de comida. En aquel entonces teníamos a Licha, a Milito, a Chirola Romero... Me acuerdo de que nos hablaban. Nos hacían entender que primero estaba nuestra familia y después el par de zapatillas. Cuando fuimos a jugar un amistoso a Colombia, nos dieron de premio 5.000 pesos. En vez de comprar alguna boludez para mí, llené la heladera. Había que cuidar a la familia.
-¿En El Porvenir sos líder?
-Sí, estoy muy contento con el grupo. Ni bien llegué me tomaron como un referente. Cada vez que hay que hablar con el presidente o en el grupo, soy el primero al que llaman para saber qué decisión tomar.
-¿Cómo es un vestuario del Porve?
-Las comodidades, obviamente, por ahí no son buenas. Puede faltar el agua caliente. Pero como les digo: lo tomo como si fuera el Real Madrid.
-¿Seguís jugando de tres?
-No, ahora el técnico me está poniendo de volante por izquierda para que entre más en contacto con la pelota y tire centros. Estoy contento con esta posición.
-¿Qué recordás del día en que Simeone te dijo que ibas a debutar en Primera?
-Estaba concentrado, en la habitación, y cayó Simeone con yogurt, bananas y todas esas cosas que le hacen bien al jugador cuando te agarra hambre a la noche. Se quedó charlando y en un momento me dijo: "José, mañana vas a debutar vos¨. Le dije: "Dale, ¿en serio?. ¿Justo en este partido tan importante me vas a poner a mi?". Empezó a reírse y me repitió: "Quiero que juegues vos, tenés mi confianza. Jugá como lo hiciste en Inferiores y en el barrio". Me dieron ganas de que el partido empezara en ese mismo momento.
-Y pensar lo que es Simeone hoy como técnico...
-Ganó con River, con Estudiantes, lleva tantos años en el Atlético Madrid... Es muy lindo que un entrenador que gane tantas cosas me haya dirigido.
-¿Cómo te trata el hincha de Racing?
-Me recuerdan más que nada por el apellido. Cuando publico alguna foto de aquel momento de Racing, siempre siento el cariño de los hinchas. Me lo hacen saber. No se olviden de que nosotros dimos la cara en el momento más duro, en la Promoción. En ese momento nadie quería venir al club y los pibes dejamos todo. Yo seguía yendo en colectivo.
-¿Cómo fue jugar esa instancia?
-Durísimo. Sabíamos que la presión era enorme. Teníamos que dejar a Racing en Primera y, a partir de ahí, las cosas iban a mejorar, incluso los contratos. Después llegaron las cosas buenas y a algunos nos vendieron.
-¿Qué sentiste cuando Bustos, con el arco vacío, quedó a punto de convertir para Belgrano en aquella final?
-Era un jugada que ya era gol... Siempre digo que Dios lo tocó de atrás. Tuvimos la suerte de que fallara, se nos iba a complicar mucho.
-¿Qué te queda pendiente en tu carrera?
-Me gustaría jugar de nuevo en Primera porque sé lo que puedo dar. Sé que a Racing no voy a poder volver por muchos motivos. En mi caso me siento solo porque no tengo ningún allegado al club. Pero me gustaría volver e enfrentar a Racing en el Cilindro para sentir otra vez esa sensación de entrar a esa cancha. Sería como volver a jugar en Racing.
-¿Tan lejos te ves del club?
-Sí, las cosas cambiaron. Si hoy no tenés un representante metido en el club, se complica. Más en mi situación, donde me siento solo.
-Volviendo al tema representantes. ¿Qué fue lo peor que viviste?
-El consejo que les doy a los pibes es que no se confíen en ellos. Son unos lagartos que están esperando para comerte la billetera. En mi caso, el que me hizo eso fue Leo Rodríguez: me llevó al Benfica, hizo todo el negocio él y después me robó plata que me correspondía a mí. Nunca me lo hizo saber, pero me entere después, cuando puse un abogado. Y me tuvo que devolver la plata.
Autores: Nico Montala y Nando Maderna
Muy buena nota y una triste historia.
ESTO ES UNA CLARA EVIDENCIA DEL MAL QUE HAN HECHO EN EL FUTBOL LOS LLAMADOS REPRESENTANTES. SHAFFER APARECIO COMO UN MUY BUEN JUGADOR Y EN UN PUESTO DONDE NO ABUNDAN, MARCADOR DE PUNTA.PERO NO ES EL UNICO CUANTOS QUEDAN EN EL CAMINO, TENIENDO POSIBILIDADES DE JUGAR EN ESTE CASO EN RACING.Y ME PREGUNTO QUE PASA CON JUGADORES COMO VALENZUELA, DI NENNO, CASTRO Y OTROS QUE EN LAS DIVISIONES INFERIORES DEMOSTRARON MUCHO TALENTO Y LUEGO SE PERDIERON O LOS PERDIERON, AUN RECUERDO QUE DI PLACIDO DIJO QUE NO PODIA JUGAR EN RACING SI NO CAMBIABA DE REPRESENTANTE..
Gratos recuerdos de José Shaffer. Leo Rodriguez un tipo que jugó en la selección, afanándole plata a un jugador, que cosa detestable, se aprovechan de jóvenes que quizá no tengan tanto conocimiento en muchos temas. Sigan con estas entrevistas a ex jugadores de Racing, Me encanta entrar a leerlas