Contrariando a Napoleón, en Racing "la mejor defensa no es un buen ataque". Te agarra un día con la pólvora mojada arriba y andá a cantarle a Gardel, o mejor dicho, a terminar a las puteadas por una goleada en contra que pudo haber sido peor aún. Un equipo grande debe tener un arquero salvapartidos y hoy, con Orion, los ataques rivales son una garantía de éxito. Pero no le caigamos solo al ex Boca... Con Pillud y Pablo Alvarez nos pasan como en una autopista un primero de mayo: sabés que por ahí llegás tranquilo. Y los centrales, que en una jugada son la gloria y en la siguiente Devoto. Raro, además, en este equipo de Cocca tanto revoleo de pelota y falta de conexión. Un medio flojo, donde la figura fue Aued por todo lo que lo extrañamos. Le dimos valor a su primer pase porque el Pulpo está para otra cosa. Meli, lo de siempre: anodino y nunca protagonista. Y si encima el Huevo tiene un mal partido y Bou no la emboca, era lógico que besáramos la lona. En fin, esperemos que este golpe sirva para madurar y que Cocca se las pueda arreglar con esta defensa porque hasta mitad de año no podés incorporar a nadie. Hay que recuperar la solidez defensiva, es lo que todavía nos da la esperanza de entrar a la Libertadores, y esperar que Boca se caiga para arremeter en esta ocho fechas que faltan. ¿Si sigo pensando en el campeonato? ¡¡¡Obvio, soy de Racing!!!
