Racing jugará esta tarde, desde las 17, ante Chacarita y en esta nota de RdA repasaremos una formación compuesta por algunos de los tantos jugadores que pasaron por ambos equipos. Seguí leyendo esta nota para ir entrando en clima de partido.
En el arco lo ubicamos a Pedro Antonio Vivalda, aquel guardametas que inició su carrera en River Plate a mediados de la década del 70, luego tuvo un buen paso en el Funebrero, un par de años en el fútbol colombiano y terminó retirándose en la Academia, donde era suplente en 1990.
En la defensa podemos ponerlo a Cristian Grabinski, aquel defensor morrudo y de rulos que se inició como futbolista profesional en Newell´s Old Boys de Rosario. Arribó a la Academia a mediados de 2003 de la mano de Ángel Cappa. Jugó tres temporadas en Avellaneda, donde mantuvo rendimientos discretos. A Chacarita llegó a mitad del 2008 y jugó como titular más de 60 partidos en buen nivel.
Como primer zaguero central aparece Diego Crosa. El Pelado, otro que arrancó en la cantera leprosa, recaló en Racing en el año 2004. Estuvo en el club por tres años, en los cuales su nivel fue de mayor a menor. Se terminó retirando en el Funebrero.
Otro marcador central es Javier Pinola. El actual defensor de River comenzó jugando en Chacarita, en donde estuvo hasta el año 2002. Tras un breve paso por el fútbol español, llegó a Racing de la mano de Ubaldo Matildo Fillol y mantuvo un buen nivel hasta que emigró en el año 2005.
De lateral por izquierda no hay chance de que no aparezca Carlos Isidro Olarán. Llegó a Racing a pedido del Coco Basile, luego de mostrar buenos rendimientos tanto en Argentinos Juniors como en Chacarita. En la Academia fue pieza fundamental para el equipo que salió campeón de la Supercopa 1988.
En el mediocampo, como volante por derecha, tenemos a Sebastián Romero. El Rulo, quien apareció como un interesantísimo volante en Primera con el Funebrero, llegó a Racing para jugar en la temporada 2006-2007, en la que no terminó de cumplir las expectativas de la gente.
Un volante central que no anduvo para nada bien en Avellaneda fue Federico Vismara. La Bruja, quien actualmente retornó a Chacarita luego de haber tenido un buen paso varios años atrás, había llegado a Racing a principios de 2016 de la mano del entrenador Facundo Sava. Jugo poco y nada y lo llamativo fue que pese a su marcada inactividad, decidió quedarse el mayor tiempo posible para no perder su contrato.
Como volante por izquierda lo situamos a Nicolas Oroz. El pibe surgido de la cantera racinguista, debutó en la Primera de la Academia en el 2014. Sin lugar en la Acadé fue cedido a Chacarita, donde fue una de las figuras del equipo que terminó consiguiendo el ascenso a la máxima categoría del fútbol argentino en el primer semestre de 2017. Regresó a la Academia pero no pudo consolidarse. Actualmente reencontró su mejor nivel en el fútbol chileno.
De enganche, el gran Rubén Capria. El Mago surgió de la cantera pincharrata y llegó a la Academia a mediados de 1995. Tuvo tres etapas en el club, en las cuales las primeras dos se lo vio en gran nivel, con una exquisita pegada y apariciones decisivas en partidos importantes. En Chacarita jugó en la temporada 1999-2000 y dejó también una huella gracias a su buen rendimiento.
Como delanteros los ponemos a Maximiliano Estévez y a Silvio Carrario. El Chanchi, producto de la cantera académica, debutó en Primera con Racing en el año 1998 y años después se consagró campeón en el Apertura 2001, cuando fue uno de los goleadores de aquel equipo de Mostaza. Tuvo tres etapas en el club y es muy querido por la gente. En San Martín también dejó un buen recuerdo ya que fue parte del equipo que ascendió de la B Metro al Nacional B en 2014.
Carrario, en tanto, llegó a Racing a mediados de 1995 de la mano de Pedro Marchetta. Su nivel en el club fue de mayor a menor, ya que había arrancado convirtiendo varios goles, pero una grave lesión y problemas contractuales complicaron su permanencia. Chacarita fue otro de los múltiples clubes en los cuales jugó y en donde dejó una marca importante, inflando redes entre 1998 y 2001.
Como entrenador lo ponemos sin dudas a Reinaldo Carlos Merlo, a quien aprovechamos para mandarle fuerzas para su pronta recuperación. Mostaza fue técnico del Funebrero en el año 1997 y es sabido que llegó a Racing en el año 2001, donde a finales de ese año su equipo quebró la racha de 35 años de sequía en títulos locales y se consagró campeón del Apertura. Tuvo otros dos pasos por el club y es adorado por todo el pueblo racinguista.
Pasando en limpio la formación sería: Vivalda; Grabinski, Crosa, Pinola, Olarán; Romero, Vismara, Oroz, Capria; Estévez y Carrario. DT: Reinaldo Mostaza Merlo.
Todo bien