Enzo Copetti entregó la imagen con más tinte heroico en la noche en Brasil, Terminó con su cabeza vendada, después de luchar como un gladiador en un partido caliente y de convertir nada menos que el gol del triunfo por 2-1 sobre Cuiabá, pro la Sudamericana. Fue reflejo que funcionó como mejor resumen de un equipo que se entregó al máximo y se plantó, con personalidad, para dar vuelta el resultado luego de ir 0.1 abajo. Ahora bien, detrás de esas postales en las que el delantero apareció como un batallador, ¿qué le pasó a Copetti en su cabeza en la victoria de Racing contra Cuiabá, por la Copa?
En un choque accidental con Walter y un defensor del conjunto brasileño, el atacante recibió un golpe en la testa que le provocó un corte. Según le contaron a este portal no fue necesario que le aplicaran puntos de sutura. Para cerrar la herida fue suficiente la colocación de la gotita. Inmediatamente, claro, le protegieron la zona con un vendaje que le cubrió gran parte de su cabeza. Lejos de amedrentarse, Cope siguió peleando por cada pelota como si fuera la última y con la potencia que lo caracteriza.
Cómo había empezado Copetti en el Racing - Cuiabá, por la Copa, antes del golpe
Había arrancado el encuentro a contramano, sin chances de gol. Pero tuvo lucidez para, de espalda al arco, tocársela atrás a Aníbal Moreno, quien le pegó de zurda y clavó un golazo, el del empate transitorio de Racing. Más tarde, Copetti esperó el buen tiro libre en forma de centro de Gonzalo Piovi, anticipó en el primer palo y, con el pie derecho, selló la victoria. Copetti sigue subido a la ola de un gran momento en lo personal. En lo que va de este semestre ya convirtió ocho tantos, seis por la Copa de la Liga, uno por Copa Argentina (ante Gimnasia y Tiro de Salta, por los 32 avos) y uno por la Sudamericana (el que hizo el martes). Además, con 10 conquistas, es el máximo artillero de Racing en la era Fernando Gago. Lo sigue Javier Correa, con nueve.
Luego de tiempos de resistencia del público, Copetti se ganó la confianza de todos en Racing a fuerza de goles. Gago lo puso de 9 y ya no por el costado derecho, donde lo ponían los anteriores entrenadores. Allí, el delantero de la Academia se desgastaba cuando retrocedía, perdía peso ofensivo y claridad. Adentro del área, en cambio, tiene un poder de fuego que lo hace siempre peligroso y sus constantes movimientos les generan espacios a sus compañeros.
Foto de portada: @RacingClub
Copetti es un gladiador, va al frente como trompada de loco y cuando tiene la chance asiste y define con gran calidad, como ayer que abrió el pie derecho para direccionar de primera el muy buen centro de Piovi, con 10 goles es el goleador de la era Gago, no caben dudas ya quien debe ser el 9 de Racing, en mi equipo lo quiero siempre.