Racing ganó un juego caliente y se prendió

Tal como se esperaba, Racing y Unión jugaron un partido bien caliente en Santa Fe. Porque son dos equipos muy intensos y dinámicos, que buscan lastimar a las defensas y hacerse protagonista del juego. Partido, entonces, de alta complejidad para la Academia en la Liga Profesional, que encima llego a la cancha del Tatengue sin triunfos en las últimas cuatro visitas, con tres derrotas y apenas un empate.

El primer tiempo polémico de Racing contra Unión

En la previa, Fernando Gago esta vez fue por lo tradicional. Volvió el 4-3-3, con las novedades de Mura como lateral por derecha, Gómez de interno y Maxi Romero otra vez de centrodelantero en lugar de Paolo Guerrero. No arrancó bien Racing en cancha de Unión. Le costó hacer pie, el mediocampo perdió mucho la espalda y a la dupla central suplente le llegaron demasiado abiertos. Lo más positivo que hizo la Academia en los primeros 20 minutos fue salvarse y mantener el cero en el arco. Ya sin Carbonero, lesionado en una rodilla y con Hauche en cancha, fue precisamente el Demonio la clave para abrir el marcador. A los 24', Insúa le tiró un pase largo, Hauche desbordó y tiró un centro bárbaro a Romero. El 9 metió el frentazo y puso en ventaja a Racing contra Unión en el primer ataque.

De ahí en más, el primer tiempo se tiñó de polémicas. Llegando a la media hora, Luna Diale dejó en el camino a Arias y definió bárbaro con un ángulo muy cerrado. Sin embargo, Galván llegó justo a meter la zurda para salvar sobre la línea, pero el árbitro Ramírez cobró el gol. Allí intervino el VAR. Habían aparecido los fantasmas del gol fantasma que le cobraron a Racing contra Tigre, pero ante Unión no pasó lo mismo. Anularon el gol del local y la Academia siguió arriba. Un par de minutos después, el autor del gol se quedó caliente. Por eso, le entró en plancha a Gabriel Rojas y el árbitro le mostró una amarilla que quedaba corta. Fue otra vez el VAR el que hizo cambiar la decisión del árbitro, quien expulsó al jugador de Unión a los 34' del PT. Hasta el descanso, un par de tiros libres de Matías Rojas pudieron convertirse en el segundo del equipo de Gago.

La segunda mitad no mostró una buena imagen de la Academia

Ya en el segundo tiempo, la tónica del partido no cambió. De hecho, Racing sufrió ante Unión mucho más de lo que se podía pensar. Porque retrocedió mal, no estuvo claro en las contras y Nardoni con Moreno no tuvieron el mejor partido. De hecho, el Tatengue, que jugaba con uno menos, llegó al empate de pelota parada. El punto débil de Racing en este campeonato otra vez se lo hizo pagar caro. Arias salió a romper, chocó con Insúa y le dejó la pelota suelta a Gordillo, quien puso el empate parcial. La Academia sintió el golpe y quedó sin reacción. De hecho, la pasó mal y el local amagó con llevarse el triunfo. Sin embargo, le hicieron penal a Matías Rojas y el mismo paraguayo lo cambió por gol. En la última, Paolo Guerrero definió mano a mano para el 3-1 final.