El puntero de la Superliga no tiene nada a qué temerle. Cuenta con la ayuda de Superman cada vez que lo necesita. Un superhéroe, un monstruo de ojos grandes y pestañeo escaso. Porque para defender el arco de Racing, uno de los más grandes del mundo, se necesitan los ojos bien abiertos. Por eso Gabriel Arias no da lugar a nada. Cualquier cierre de visión podría significar un error. Esa es la razón por la que sus ojos permanecen grandes hasta el ardor.
Gaviota (así lo bautizó Marcelo Díaz) tiene también su compromiso bajo los tres palos del otro lado de la Cordillera. Arias lleva 290 días como arquero de la Roja. Poquito antes de llegar a Avellaneda, el 6 de junio de 2018, fue convocado por primera vez para la triple fecha FIFA ante Rumania, Serbia y Polonia. Estuvo en el banco ante el primero y fue titular frente a los últimos dos.
En septiembre volvió a ser citado por Reinaldo Rueda para la gira asiática que toparía a su seleccionado con Corea del Sur. Disputó el partido completo y sin goles. Y en octubre, cuando se preparaba para afrontar el amistoso ante México, se fracturó el cuarto metacarpiano de la mano derecha, en un entrenamiento. ¿Total de minutos? 270 con el combinado trasandino.
El hábito de Arias
Hoy nuevamente convocado, Arias continúa una sana costumbre de los arqueros de Racing. Ser citados a su Selección. Antes de Superman, el último en ser llamado a un combinado nacional durante su estadía en la Academia había sido Gustavo Campagnuolo. Mientras peleaba el campeonato con el equipo de Mostaza Merlo, Marcelo Bielsa lo incluyó en la nómina para disputar la decimosexta fecha de las eliminatorias en octubre de 2001, ante Paraguay. Pero no llegó a disputar ni un minuto.
Ignacio González también tuvo su oportunidad en la Albiceleste. Fue mientras defendía la valla del cuadro dirigido por Alfio Basile. Fueron cuatro encuentros en 1997, incluido el debut ante Ecuador por la Copa América de Bolivia.
Sergio Livingstone, Rogelio Domínguez y Agustín Cejas también tienen historia con sus respectivas escuadras nacionales, mientras cubrían con su inmensidad los arcos de Corbatta y Mozart. Al igual que Arias, el Sapo Livingstone defendía los colores de Chile. Llegó a Racing en abril de 1943 y sólo estuvo durante ese año. Desde la Copa América de 1941 venía siendo citado a su Selección, presencia que duró hasta 1954.
Rogelio Domínguez tuvo un 1951 inolvidable. Tras ser campeón con la Academia del torneo de ese año, llegó su oportunidad en el Seleccionado que dirigía otro hombre relacionado con Avellaneda: Guillermo Stábile. Hasta 1958, año en que finalizó su ciclo en Racing, sus colores amados fueron dos. El celeste y el blanco.
Un emblema del club como Agustín Cejas, recibió el llamado en junio de 1969. Sí, mientras volaba para la foto en el Cilindro, dos años después de ser campeón del mundo. Disputó nueve partidos con Argentina y sufrió como nadie la decepcionante no clasificación a la Copa del Mundo de México 1970. Todos aseguraban que ese sería su mundial.
Los convocados que pasaron por la Academia
Entre las filas de guardametas que jugaron en Racing pero no militaban allí al momento de su citación al equipo nacional, se encuentran varios nombres de peso. Ubaldo Fillol tuvo su primer periodo en Avellaneda entre 1972 y 1973. Pero su convocatoria recién llegó un año más tarde, como tercer arquero para el Mundial de Alemania. 1985 fue su último año en el conjunto albiceleste y en 1986 se produjo su regreso a Racing.
Carlos Roa y Albano Bizzarri se pusieron la camiseta de la Academia desde 1988 hasta 1994, y de 1995 a 1998, respectivamente. Pero sus oportunidades en la Selección no se dieron durante aquellos años. Lechuga disputó ocho encuentros entre 1997 y 1999, incluidos cinco en el Mundial de Francia 1998. En ese lapso, su carrera se repartió entre Lanús y Mallorca. Por su parte, Albanito ya era arquero del Real Madrid cuando Bielsa lo citó a la Copa América de 1999 en Paraguay.
Los últimos casos se relacionan directamente a Sergio Romero y Juan Musso. Cuando a Chiquito le llegó la convocatoria por primera vez en 2009, ya no estaba en Avellaneda. De hecho, jugó sólo cuatro partidos. Luego lo que todos conocemos. Dos mundiales, su conversión a modo héroe frente a Holanda, la final ante Alemania y su frustrada baja por lesión en Rusia. Musso por su parte fue citado por primera vez. Hace ocho meses que ya no defiende los colores de Racing pero su gran momento en el Udinese lo trajo hasta acá. Como a Arias. Que sigan los arqueros de Selección.
Te olvidaste del gran pato fillol
Está: Ubaldo Fillol tuvo su primer periodo en Avellaneda entre 1972 y 1973. Pero su convocatoria recién llegó un año más tarde, como tercer arquero para el Mundial de Alemania. 1985 fue su último año en el conjunto albiceleste y en 1986 se produjo su regreso a Racing.
Hay que agregar a Jorge Osvaldo Negri, arquero titular del equipo argentino que ganó el Campeonato Sudamericano de 1959, que dejó en segundo lugar a Brasil; que había sido campeón mundial en 1958, y que vino con todas sus estrellas, Pelé incluido. En este equipo, jugaron además otros 7 académicos, casi todos también titulares: Murúa y Cap como defensores y la delantera completa: Corbatta, Pizutti, Manfredini, Sosa y Belén.
Increible olvido el mejor Ubaldo Matildo Filliol y ademas Lechuga Roa, propio de Racing de inferiores
no se si lo agregaron después, pero esta en la nota el gran pato filliol
Falto yo!!!
el que si falto es goycochea
Botasso, Rogelio Domiguez, Negri, Cejas, Fillol, Roa, Nacho González,Campagnuolo, Chiquito Romero,(Arias y Livingstone en Chile). Enormes arqueros de Racing en la selección argentina y de Chile. Un lujo que pocos se pueden dar.
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